Carnaval en León y ese caos bonito que se forma
Guía Turística León
El programa lo saca el Ayuntamiento unos días antes y cambia poco. El sábado hacen el desfile infantil por el centro y se llena de familias, muchos con carros disfrazados y niños que no quieren que se acabe nunca. El lunes toca el entierro de la sardina, algo raro si no lo conoces, una despedida en tono de broma con gente de negro que canta por las calles del casco viejo. El martes llega el grande, el desfile de verdad, sale desde Guzmán y termina en la Catedral. Hay música, charangas, confeti, grupos de colegios, peñas, hasta empresas pequeñas que se animan. Es largo, la gente se amontona y cada año parece más grande.

En la Plaza de la Inmaculada y en Santo Domingo ponen escenarios con conciertos y DJ. No es una fiesta cerrada, puedes ir disfrazado aunque no participes, nadie te mira raro. Por la tarde todo acaba en el Barrio Húmedo y ahí ya es otro mundo, los bares llenos, tapas gratis, música por las ventanas, gente bailando con abrigos encima del disfraz. No hay orden pero todo funciona, lo mejor es dejarte llevar y no pensar mucho en horarios porque siempre pasa algo a cualquier hora.
El tiempo suele ser frío y seco aunque a veces llueve un poco pero da igual. Se recomienda ropa cómoda y calzado firme porque el suelo se llena de confeti y vasos. Si vas con niños lo mejor es el desfile del sábado o el del martes por la tarde, hay espacio en las avenidas amplias y se ve bien. Si te gusta hacer fotos busca hueco en Ordoño II o cerca de la Catedral, ahí las luces quedan mejor y el fondo es bonito.
Durante esos días los bares sacan lo mejor de su cocina con platos y dulces de carnaval. Las orejas, las filloas, las torrijas y claro vino del Bierzo por todos lados. También hay menús especiales en restaurantes del centro y conviene reservar con tiempo porque se llenan fácil, sobre todo el martes. Si no tienes sitio siempre queda tapear y moverte de bar en bar que es lo más típico aquí y lo que mejor funciona.
El carnaval no se limita a un punto, está por toda la ciudad. En la Plaza Mayor hay puestos de comida, en El Ejido hacen fiestas vecinales, en La Lastra también. Todo se une en el centro. No necesitas coche, andando se llega a todo y es lo más cómodo. León es pequeña y eso ayuda mucho. Puedes ver el desfile, tomar algo y volver sin complicaciones.
Si vienes de fuera lo mejor es alojarte en el centro. Los apartamentos MK77 León están muy bien ubicados, modernos y cerca de todo. Desde ahí llegas andando a los desfiles, al Húmedo y a la Plaza Mayor. No hay que pensar en aparcar ni en coger taxi. Y cuando acaba el ruido cierras la puerta y se acaba el jaleo. Eso se agradece.
Si te quedas un par de días más hay cosas que ver. La Catedral por dentro impresiona, la Basílica de San Isidoro merece la visita y si te gusta caminar el paseo por Ordoño hasta la Plaza de Guzmán es fácil y bonito. En invierno León tiene encanto, el aire frío, las luces, los bares pequeños. No hay que hacer mucho más, solo vivirlo.

